Monserrat Graña
PROVIDENCE.- Los llamados “swingers” o las personas que intercambian sus parejas ya sea con otras o con personas solas, con propósitos sexuales estaban en plena fiesta el pasado 2 de abril cuando agentes de la policía irrumpieron en el club Sebastian’s Party Place del 928 de la calle Plainfield en Providence.
Según las autoridades, una mujer oficial de la policía de Johnston y un detective de la Policía Estatal se hicieron pasar como pareja, pagaron los $25 dólares de entrada y llegaron a la reunión que en cuestión de minutos, de acuerdo al parte policial, comenzó a tornarse bastante provocativa, con mujeres que bailaban insinuantes en el bar, seguido de un concurso para escoger el mejor y más sexy cuerpo masculino, el ganador recibiría sexo oral de una de las invitadas.
En el concurso de camisetas mojadas participaron ocho mujeres que en una inocente piscinita para niños, terminaron desnudándose.
Fue precisamente en ese momento que el detective envió un mensaje de texto a los oficiales que estaban afuera, que inmediatamente ingresaron para proceder con el allanamiento, el establecimiento fue evacuado y cerrado por esa noche.
El dueño del club, Steven Santilli fue arrestado y acusado con un cargo mayor por el delito de promover shows y publicaciones censurables y obscenas, así como también con infracciones a ordenanzas municipales y por no tener una licencia de entretenimiento para adultos.
Sebastian’s tiene una licencia regular para entretenimiento con karaoke, mesas de billar y música en vivo, además de una licencia para licor Clase B.